jueves, 30 de octubre de 2014

Lobezno de Larry Hama I.

La irrupción en el mercado comiquero norteamericano de Image cómics, fundada en 1992 por el 'magnífico' Rob Liefeld y sus amigos, marcaron un 'año cero' de basura desbordante en el mundo comiquero. El 'efecto Image' empezó como una bola de mierda que iba incrementándose en tamaño conforme avanzaba a rodar alcantarilla abajo.

Las mejoras en el papel de los cómics, el coloreado por ordenador, las portadas holográficas y las ediciones especiales obligaron a las otras compañías a sumarse al carro de molar tanto o más que ROB! y sus colegas.

Al mismo tiempo que esos discutibles avances  en la calidad de los cómics se ponían de moda, otras modas mas perturbadoras llegaron: dibujantes clónicos, historias infames o antihéroes chungos. 


De repente, todo el mundo intentaba dibujar como Jim Lee, Marc Silvestri o (que el cielo nos guarde) ROB! Liefeld.
La era de los Mark Pacella, Roger Cruz, Stephen Platt, Tony Daniel y demás fulanos dió comienzo.

El molonismo se traducía ahora en los cómics en tipos duros fascistas, pistolones y tipas medio en bolas.
Al mismo tiempo, los guiones se iban dejando como algo secundario. Lo importante era hacer dibujos guays para vender posters y camisetas.

Y aunque estoy de acuerdo en que los 90 fueron una puta mierda para el mundo de los tebeos entre la inmensa montaña de basura de la época surgieron interesantes etapas y series que a día de hoy siguen siendo igual de buenas que cuando se publicaron:
Hulk y X factor de Peter David, The New Warriors de Fabian Nicieza y Mark Bagley, Excalibur de Alan Davis, el guantelete del infinito de Jim Starlin, Spawn de Mcfarlane (aunque muchos la odien) o Sin City de Frank Miller entre otros muchos, sirven como ejemplos alabados por casi todos los comiqueros.

Pero aunque todas ellas molaban, molan y molarán mil, y aprovechando la "muerte de Lobezno", que vaya chascazo de historia (al menos espero que lo dejen muerto al menos cinco años), este posteo en concreto lo quiero dedicar para reivindicar una de las mejores etapas de la primera colección de Lobezno. 
Cuando Lobezno aún era un personaje cojonudo e interesante y no el pesado omnipresente que ha terminado por arruinar la creación de Len Wein y Herp Trimpe.


Antecedentes:
Lobezno ya era un personaje popular en los 80 (en el mundo del papel, claro) así que los mandamases de Marvel, ávidos por estrujar aún más la gallina de los huevos de oro de las series de mutantes, le encargaron a Chris Claremont que escribiera una colección del canadiense.

Lobezno ya había gozado de una magnífica miniserie hacía varios años (Honor, de Chris Claremont y Frank Millery un serial publicado en Marvel Comics Presents titulado Misión: Salvar al tigre que servía como introducción a su serie regular; muy recomendable por cierto, aunque la limitación de narración a ocho páginas por capítulo la lastre un poco.

En un principio, las aventuras de Lobezno se alejarían de ambientes superheróicos y sucederían en una ciudad ficticia llamada Madripur, una especie de cruce entre Casablanca y Tokio, en la que Logan bajo la identidad de "Parche" camparía a sus anchas pendoneando por ahí como socio de un tugurio llamado el bar Princesa.
Logan en su identidad de 'Parche'.

Tras un par de arcos argumentales bastante potentes: el que inauguró la colección llamado "La espada negra" (Wolverine vol 2º #1-3), los siguientes episodios que trataban sobre la guerra abierta entre Tyger-tigre y el General Coy para controlar los bajos fondos de la ciudad (Wolverine vol 2º # 4-8), y la divertida "el caso de la joya Gehenna" (Wolverine vol 2º # 11-16); la colección empezó a flaquear tras una estrambótica aventura guionizada y dibujada por John Byrne, con un viejo cyborg nazi (que había sido el peluquero de Hitler), una muchacha revolucionaria llamada la Bandera y un dictador sudamericano obsesionado con una monja curandera (Wolverine vol 2º # 17-23).

La confirmación de que la cosa se iba a la mierda fueron los decepcionantes siguientes episodios sueltos (Wolverine vol 2º 24-26) y el siguiente arco argumental: El proyecto Lázaro (Wolverine vol 2º # 27-30). Una aventura tan mala como comer tuercas oxidadas guionizada por Mary Jo Duffy y alternándose en el dibujo por unos tuercebotas como Bill Jaaska y Barry Kitson.
Pero entonces, cuando todo apestaba como la sede del PP, llegaron ellos: 
los putos amos Larry Hama y Marc Silvestri.

El primero venía de guionizar una serie de tercera fila y algunos números de relleno por aquí y por allá para comer de caliente y sinceramente, nadie daba un duro por su trabajo.
En cambio, el amigo Silvestri ya se había ganado el favor de los comiqueros en Uncanny X men y ya era todo un máquina capaz de, al menos, sorprendernos en el apartado gráfico.

Silvestri se encargaría del dibujo hasta el número 56 (creo) para después tener bailes de dibujantes bastante potables como Andy Kubert (al que le tengo algo de tirria por dibujar siempre a sus personajes achaparraos e ir por la vida como un clon de Silvestri), un más que correcto Darick Robertson durante un par de episodios, el portugués Mark Texeira y su sucio y efectivo trazo barroco, un tipo llamado Dwayne Turner (al que solo conozco de la serie Curse of Spawn y que aquí no me entusiasmó demasiado) y Adam Kubert, que acababa de despuntar de lo bueno que es el cabrón (no como su jodido hermano Andy Kubert) en Espíritus de la venganza.
Hama, en cambio, permaneció en la serie hasta el número #118, aunque también es justo y necesario resaltar que a partir del número #92, más o menos, comenzó a flaquear y a írsele la bola cosa mala pero le perdono por todo lo anterior a ese tope.

Argumentos:
La cosa empezó animada con una trilogía (Wolverine vol 1º # 31-33) en la que Lobezno emprendía una cruzada sangrienta contra un clan yakuza que se ponían hasta el culo con una droga que los volvía unos putos salvajes (rollo droga caníbal) y que era extraída del cerebro de unos monos originarios de Madripur.
Logan terminaba yendo a Japón  para rematar el trabajo empezado en Madripur y matar al Oyabun del clan. 

En Wolverine vol 1º #34, Logan ayuda a un montana canadiense a dar caza a un violador, y de paso, se da de hostias con un bicho llamado el cazador de la oscuridad. El episodio servía con ayuda de flashbacks a remontarnos a la época en la que Lobezno vivía involucionado a un estado salvaje en esas montañas y también para mostrarnos su participación en el día D (gran flashback con Logan acuchillando nazis).
Dama mortal dando por culo.

Pasamos entonces a Wolverine vol 1º # 35-37. Lobezno y Puck, un colega suyo miembro de Alpha Flight, son absorbidos por un vórtice espacio temporal que les trasporta hasta la España de la guerra civil.
Allí Lobezno hace camarilla con Ernest Hemingway y un grupo de combatientes republicanos contra Dama mortal (que también había sido absorbida por el puto vórtice) y la legión Kóndor en Guernika durante el bombardeo franquista a la población. Hama usó esta bizarrada de aventura para situar en el desconocido pasado de Logan su participación junto a las brigadas internacionales en la guerra civil española.

En España estos tres números fueron editados en un prestigio con el ridículo nombre de Sangre, arena y garras. El editor de fórum se ve que se flipó con el argumento en la guerra civil española y quiso darle cierta importancia a la historia.

Se pondría paternalista después con una niña-robot, Elsie-Dee, programada por Donald Pierce para matarle, pero la pequeña robot cambió su programación al sentir cariño por su nuevo amigo. A raíz de esos sucesos, Lobezno se ve abocado a un berenjenal de hostias en los túneles morlocks primero y por todo Manhattan después con un desfile de apariciones estelares de personajes: Forja, Júbilo, Cable, Dientes de sable, el cazador en la oscuridad, Nick Furia (el de toda la vida: el blanco), Dama mortal, Elsie Dee, Albert -un doble robótico de Lobezno muy amigo de Elsie Dee- y Máscara (Wolverine vol 1º # 38-46).

Hama tuvo tiempo de hacer una secuela de el fabuloso Arma X de Barry Windsor-Smith con El programa Shiva (Wolverine vol 1º # 48-50). Aquel arco ponía en tela de juicio algunas de las respuestas acerca del pasado de Logan que se aseveraban allí, especificando inteligentemente que algunos de los recuerdos que tenía Lobezno podían ser recuerdos implantados por el programa Arma X para tocarle las pelotas y mantenerlo controlado. De esta forma, las tantas incongruencias que diferentes autores habían ido tejiendo a lo largo de los años sobre el difuso pasado de Lobezno cobraban mucho sentido.

Lobezno y el cadáver de Mariko.
Poco después, tras una saga bastante extraña y confusa con MojoEspiral Mística de por medio llamada "El enigma de Chunch", en referencia a la teoría del Big Chunch (Wolverine vol 1º # 51-53), Hama le hace regresar a Japón en una aventura junto a invitados de lujo como Júbilo, Gambito, Fuego solar o el Samurai de plata, y de paso hacerle una putada gordísima a nuestro amigo de las garras.
Mariko Yashida, la eterna novia de Lobezno, muere envenada. El pobre Logan accede a las súplicas de su amada a matarla con sus garras para evitarle la agonía de morir por el veneno (Wolverine vol 1º # 55-57).

Tras este viaje a Japón la serie se toma un descanso de dos números en una aventura (situada cronológicamente antes de la aventura en Japón) con Júbilo y un personaje raro llamado Terror (Wolverine vol 2º # 58-59) para volver otra vez su mirada al pasado de Lobezno; en concreto a su integración en un comando especial de la Cia formado por él mismo, John Wraith, Victor Creed (dientes de sable) y Maverick a la reunión de éstos para hacer frente a uno de los responsables de Arma X que ayudó a implantarles recuerdos falsos (Wolverine vol 2º 60-64)

Logan en sus tiempos con la Cia.
Este particular 'grupo salvaje' se encargaba de realizar misiones guarrindongas para el gobierno Usa, desde apoyar revoluciones en Sudamérica, pasando por sabotear el programa espacial soviético o robar secretos de estado a lo ancho y largo del mundo. Además, durante estos episodios regresa Zorra plateada, antigüa novia de Lobezno supuestamente asesinada por Dientes de sable hacía la tira de años (que fue narrado a modo de flashback en Wolverine vol 2º # 10). En ésta ocasión Dientes de sable si que mata a Zorra plateada ante un Lobezno lloriqueante.

Con la muerte de Mariko y la de la Zorra (jajaja) a Lobezno le da un chungo y su mente se desequilibra haciéndole creer que está en el pasado realizando una misión para la Cia: matar a alguien llamado Terry Adams (Wolverine vol 2º #65-68). Nombre código de una base espacial rusa custodiada por un fulano cutre llamado Rojo Épsilon (parecido al un poco menos patético de Rojo Omega). Logan recupera la cordura finalmente y ayuda al Épsilon ese a cumplir su sueño de irse a vivir al espacio.

Una de las cosas más interesantes de estos episodios, publicados en España en un tomo llamado Estado de gracia, son el primer episodio con Logan metido en una masoquista y brutal pelea de bar con unos moteros y la posterior confesión a Jean Grey sobre lo jodido que es tener un factor de curación que sanaba cualquier herida física pero que no actuaba sobre el dolor emocional que había soportado en toda su vida.

Larry Hama vuelve a involucrar a Lobezno en asuntos de la Patrulla X en (Wolverine vol 2º # 69-71) y en (Wolverine vol 2º # 72-74). En la primera trilogía de números Lobezno, acompañado de Pícara, viajan a la tierra salvaje tras la supuesta pista del paradero de Magneto. Allí se las verán con Saurón y los mutados de la tierra salvaje, y en la segunda, junto a Júbilo, Lobezno viaja a la antigüa base de la Patrulla X de Australia y se enfrentan a unos nuevos centinelas.


¿¿Qué cojones?? ¿¿Garras de hueso??
De todos modos la traca gorda de la etapa llegaba con el número especial # 75 que formaba parte de un crossover llamado Atracciones fatales. En ese episodio, continuación directa de X men vol 1º # 25, Lobezno está a punto de morir tras la extracción forzosa por parte de Magneto del adamántium que forra su esqueleto.
A raíz de ese suceso Lobezno queda en un estado bastante jodido de forma muy similar a cuando fue crucificado por los Cosechadores en las páginas del clásico Uncanny X men #251 .
Además, descubrimos en una dolorosa escena las garras de hueso de Lobezno. Siempre se supuso que las garras eran un añadido de adamántium insertadas en el programa Arma X y aquí Hama se saca de la manga que sus garras son naturales.
A partir de ese emotivo episodio, Lobezno abandonará la Patrulla X para comenzar una vida errante mientras sana poco a poco el daño perpetrado por el amo del magnetismo. Su primera parada es en Canadá para visitar a su amiga Heather Macdonald Hudson pero la cosa se lía y termina en una orgía de sangre con Dama mortal, Cylla y Hemorragia (Wolverine vol 2º # 76-78).

Después le tocó el turno a sobrevivir a un encontronazo con el psicótico Cyber que se puso muy pesao persiguiendo a Lobezno. Aún contando con la ayuda de Zoe Culloden, una empleada de la misteriosa firma interdimensional llamada Landau, Luckman y Lake, a Logan le tocó sufrir la rotura de sus garras de hueso y a un veneno alucinógeno que le inyecta el puto Cyber ese (Wolverine vol 2º #79-80).

Cabe destacar que Hama comienza a planear como subargumento la regresión a un estado animal de Logan a raíz de la extración de el adamántium. Ese subargumento tendrá una continuidad intermitente hasta su eclosión en el número #100.

Tras llegar a la isla Muir y reencontrarse con Rondador nocturno y Kitty Pryde, que le ayudan a eliminar la droga de su cuerpo, de nuevo hay que hacer un alto en el camino para otro jodido crossover.
Ésta vez se trata de la Alianza Falange(nada que ver con la de los fachas).
Lobezno acude en ayuda de Cíclope y Jean Grey que recien llegados de su luna de miel se encuentran la isla Muir invadida por la Falange, una forma de vida tecnoorgánica con conciencia colectiva y con ganas de asimilar en ellos a la humanidad para salvarla de los mutantes.


Al ser parte un crossover dividido en tres partes: La próxima generación (en X men y Patrulla X), Sanción final (en Lobezno y Cable) y Signos vitales (en X Force y Excalibur) si querías enterarte que rollo lleva la Falange esa y todo el mogambo te tenías que dejar las perras.
Aunque yo aviso de que la saga esta no es nada del otro mundo (siempre se puede recurrir a encontrarla por "otros medios" jejeje).

Tras la derrota de la Falange (joder, que bien suena eso), Lobezno continúa en solitario y vuelve a Madripur acompañado de Gambito. Allí tiene un encontronazo con Maverick (antigüo compañero de sus tiempos en la Cia) que enfermo del virus del legado (un símil marveliano del sida) intenta provocar a Lobezno para que le mate.
Lobezno finalmente se niega a hacerlo diciéndole que tiene que ser un hombre, apechugar con su vida y blablabla...
A pesar de ser una visita relámpago a su antigua zona de operaciones el número deja con ganas de más aventuras en Madripur, pero ya nos toca trasladarnos a San Francisco.
Masacre es el invitado de ese número y busca vengarse de su ex novia Vanessa y Logan, junto a Kane (o Arma Alpha) se ven enmedio. En aquel entonces, Masacre, el mercenario bocazas, venía de hacer apariciones en X force y de protagonizar un par de series limitadas solamente y daba cierto morbo verlo enfrentándose a Lobezno y soltar sus paridas habituales.
En el número # 89 y con la ayuda del motorista fantasma, Logan se enfrenta de nuevo a su antiguo maestro Ogún, o más bien su fantasma o algo así, ya que el Ogún ese murió a manos de Lobezno en la miniserie de Lobezno y Kitty Pryde (publicada por fórum hace mil años en Marvel Héroes #1-6, ignoro si está reeditada posteriormente).

Aquí debió morir Dientes de sable.
Y por fín Lobezno se cansa de vagabundear de aquí para allá y regresa a la mansión Xavier para encontrarse con una sorpresa: Dientes de sable está en la mansión encerrado por orden de Xavier para tratar de curar su sed de sangre.

A Logan eso le toca los cojones sobremanera pero se aguanta. La Patrulla X está fuera de la mansión (concretamente intentando detener a Legión) y Lobezno intenta alejar de su mente los instintos que le piden asesinar a Creed.
La oportunidad le viene al pelo cuando Dientes de sable se libera y tras una pelea épica Lobezno atraviesa el cerebro de Creed con una de sus garras.

El episodio es un derroche absoluto de genialidad por parte de Adam Kubert. Incluye varias splash pages triples y quíntuples dándole al duelo una epicidad parecida a aquel lejano Uncanny X men #212 narrado por el maestro Alan Davis.
Al final nos quedamos con el culo torcido al leer la onomatopeya 'schlinkt' (sustituta del 'snikt' de toda la vida cuando sus garras eran de metal) y significaba que Lobezno había sacado la tercera garra de su antebrazo.
Pero fíjate que casualidad que el puñetero Legión mata a Xavier en el pasado y la realidad se va a la mierda dando comienzo La era de Apocalipsis.


continuará...

jueves, 18 de septiembre de 2014

Krecking III: Cala Piteres-Cala Mercé.

¡Saludos a tod@s!
De nuevo la compañía kreckera ha vuelto a sembrar la incertidumbre entre los bañistas de las costas alicantinas. Me encantan esas miradas de extrañeza que nos dirige la gente al vernos aparecer de entre las rocas o del mar cargados con nuestros pertrechos.

La etapa comenzó un poco más tarde de lo planeado ya que todos nos retrasamos unos diez minutos en el lugar de quedada. Una vez repartidos en los coches salimos en dirección a Cala Piteres, nuestro punto de comienzo.

Obviando mi empanada mental para encontrar la cala Piteres y el infortunado retraso por ello, preparamos las mochilas, nos dimos cremita para el sol, nos presentamos quienes no nos conocíamos y esas cosas.
Poco después ya estábamos listos para comenzar con nuestra gesta de la que esperábamos volver con todos los dientes en el sitio.

Esta vez se animaron nuevos kreckeros a la aventura:

Juanma, que seguramente maldeciría el momento en que decidió dejarse en el coche las gafas de bucear y las aletas. Por cierto, seguramente creerá que no recuerdo que me debe un bocata de jamón :)
Ingrid, a quien ya conocía un poquillo de algunos años atrás. Me alegré mucho al verla con esas ganas de aventura, bueno, y de tomarse unas cervezas al final de la misma también ;)
Yurai, un amigo de la kreckera Reme y que le sorprendió encontrarse con una actividad así de estimulante, una pena que no pueda seguir acompañándonos en un futuro.
Aroa, una vecina mía que no sabía de su existencia hasta hace poco más de dos meses. Ella no dudó ni un segundo en unirse a nosotros cuando le propuse la ruta.
Anabel, una amiga que anteriormente había rehusado a venirse, pero que terminó por desmelenarse con el grupo después de oír hablar de la última salida. Le habían contado que hubo cierto peligro en la última salida y supongo que esperaba estar en primera fila para ver la sangre derramada en el mar.
Hugo, que intentaba por todos los medios a su alcance no caer al agua y fue el master trepador del grupo.
Y Ana, rebautizada involuntariamente por mí como Carmen, que además sufrió el acoso de mi persona al intentar sacarle fotos buceando.

El resto del grupo lo componíamos Gato, Vicky, Samer, Lydia, José Manuel, Reme y yo.

Durante el primer kilómetro y poco estuvimos roqueando sin entrar demasiado en el mar. A pesar del calor, unos 28 grados, todos estábamos muy frescos y el avance fue muy tranquilo; o por decirlo de otra forma, casi bailábamos sobre las rocas.
La característica principal de este primer kilómetro era la suavidad de la orografía, nada de rocas pequeñajas y cabronas como encontramos más adelante. Además el paisaje alicantino de cala en cala resultaba muy agradecido a la vista y la poca actividad humana por la zona invitaban a disfrutar.


Paso a paso nos acercábamos al famoso punto negro de la anterior jornada y estaba expectante por llegar (una kreckera australiana y otra polaca precisaron rescate en el agua). Nuestras mentes habían idealizado el sitio como el infierno pero cuando llegamos, la calma del mar nos permitió que pasáramos el escollo con total tranquilidad. Seguro que algún kreckero que no estuvo el día de los hechos pensaría que éramos unos lloricas (deberían haber visto el mar ese día).




Tras ese punto y recorrer una cala muy accesible para el baño llegamos al barranc de l'aigües.
Un acantilado de unos tres kilómetros y pico al final de El Campello accesible al paso por su base. Si el mar estaba en calma, como era el caso, atravesarlo no sería problema.
A partir de ahí el terreno era inexplorado para tod@s, así que, la emoción se incrementó.




Antes de abordar la parte final decidimos sentarnos a almorzar, aprovechar el descanso para reponer fuerzas, y que los fumetas nos hiciéramos un cigarrico (sería el último hasta pasado mucho tiempo pues el tabaco terminó mojado a pesar del empeño en envolverlo).

Pasados unos quince minutos comenzamos el avance. El paso por el acantilado básicamente era en línea recta con ausencia de paredes curvas que podrían complicar la cosa en caso de romper las olas, pero eso sí, andar demasiado rato por ahí con esos putos cantos rodados terminaba por cansar, así que, la mayoría de nosotros decidimos nadar en paralelo a la costa despacito pero sin pausa y de paso refrescarnos un poco.








Esto lo aprovechamos algunos para visualizar los fondos marinos y la sorprendente limpieza de la zona. Confieso que me sorprendió encontrar el mar limpísimo allí; esperaba ver las habituales bolsas de plástico, botes de refresco y demás. De hecho, si dejabas llevarte por la imaginación podías imaginar que estabas en alguna especie de paraíso donde los humanos no hubiéramos marraneado con nuestras asquerosas costumbres, bueno, algún anzuelo y líneas de palancre habían por ahí.

Tras unos cuantos descansos por algunos lugares singulares; como la lancha que había varada entre las rocas, y una zona con un agua fantástica (perfecta para pasar el día entero allí), terminamos por dejar atrás pueblo acantilado (la parte final del puto barranco) y llegamos a nuestra meta.

Cala Mercé es una cala con espigón incluido utilizada para atracar barquicos, lanchas y demás.
La verdad es que el lugar fue bastante decepcionante por el aspecto insano de su agua y el pestilente olor a detritus y gasoil que inundaba la zona, aún así eso no impidió que nuestra sensación de satisfacción al terminar esa jornada fuera gigantesca.

Por supuesto nuestra máxima prioridad después fue buscar un bareto para hincarnos unas cervezas y unos bocadillos que disfrutamos como la última comida de un condenado a muerte.


Desde aquí doy las gracias a tod@s los compañeros kreckeros pasados, presentes y futuros por haberse embarcado en esta saludable forma de conocer nuestras costas.

Saludos.



miércoles, 23 de julio de 2014

Sagas imprescindibles 3: Inferno.

¡Que recuerdos más majos que me trae éste crossover, madre mía! Y que buenos tiempos aquellos en que una saga de éste tipo servía para atar cabos sueltos y resolver situaciones estancadas...no como ahora que lo único que importa es si hay alguna puta película mierdera a la vista. En fín. 
times...

A finales de los 80 solo habían cuatro series mutantes en danza: Patrulla X, Nuevos mutantes, Factor X y Excalibur (aunque esta última iba bastante a su bola) y los líos y mierdadas argumentales aún no habían alcanzado el alarmante número de hoy en día. Pero aún así, algunas tramas estancadas sobrevolaban estas series desde hacía tiempo como un buitre a un cadáver.

Como ya había ocurrido desde la masacre mutante (el crossover que inauguró esto de hacer una saga anual) y continuó con la caída de los mutantes. En Otoño de 1988 le tocó el turno a un evento nuevo que sacudiría las telarañas argumentales de todas las series y ya de paso, sacaría algunos duricos más a los lectores; que de eso trata el negocio.
Durante cuatro meses el infierno se desataría en la Tierra y cuatro grupos de mutantes intentarían frustrar los planes de los demonios S'ym, N'astirh y su aliada la Reina duende.
Además de ajustar viejas cuentas a cochambres de personas como Mr. Siniestro y sus Merodeadores.
                                                                   


Antecedentes argumentales:

FACTOR X.
Habían pasado ya casi tres años desde la "resurrección" de Jean Grey y los miembros originales de la Patrulla X:
Cíclope, Ángel, Hombre de hielo, Bestia y la chica maravillosa se reunieron para crear una agencia que se dedicaba a "cazar mutantes": Factor X.

A los muy capullos se les ocurrió la inteligente idea de hacerse pasar por humanos y animar a la gente a que denunciaran a cualquier mutante para así "solucionar el problema". En secreto lo que hacía Factor X era adiestrar a esos mutantes que "cazaban" para que aprendieran a controlar sus poderes. Poco a poco reunieron a buen grupo de chavales que tutelaron durante un tiempo (los chavales que luego serían conocidos como los X terminadores).
Con el tiempo se dieron cuenta que la existencia de Factor X alimentaba el odio hacia los mutantes (que listos ellos) y terminaron por desvelar su tapadera ante el público después de salvar la ciudad de Nueva York de Apocalipsis y sus cuatro jinetes durante la saga de la caída de los mutantes.

Como habré contado por aquí en otros posteos (en el dedicado a la muerte de Fénix); la vuelta de Jean Grey cambió todo. Cíclope se había casado con una tipa llamada Madelyne Pryor, que es el vivo retrato de Jean Grey, y tuvo un hijo con ella . La vuelta de Jean trastocó de tal manera a Cíclope que éste abandonó a su mujer y a su hijo para estar con ella. Cuando el tarambana de Cíclope recapacitó sobre lo que había hecho volvió a su casa encontrándola vacía y sin rastro alguno de su mujer o de su hijo. Por mucho que denunció sus desapariciones no obtuvo respuesta alguna. Era como si su familia jamás hubieran existido.
En definitiva, todo ese tema se había convertido en una madeja que había que desenredar, y las preguntas se estaban acumulando sobre la mesa:

¿Quién es Madelyne Pryor en realidad? 
¿Qué ha sido de Nathan Christopher Charles, el hijo de Madelyne y Cíclope?
¿Por qué se parecen físicamente ambas mujeres?
¿Quién y porqué ha hecho desaparecer toda la existencia legal sobre Madelyne Pryor y Nathan?

Chris claremont (guionista de Uncanny X men y Nuevos mutantes) y el matrimonio Louise y Walter Simonson (guionista y dibujante de Factor X) llevaban un tiempo ya dándole vueltas a como resolver los marrones que le habían dejado John Byrne, Jim Shooter y Bob Layton. Bueno, no todos los marrones fueron heredados, algunos los había creado el propio Claremont al liar muchos argumentos o directamente olvidarlos (como si fuese un guionista de Perdidos).
Entonces fue cuando plantearon resolverlo todo en el evento que los editores les exigían.
Pensaron también en incluir algunas cuestiones que en Nuevos mutantes se estaban planteando también:

NUEVOS MUTANTES.

Hacía tiempo que Illyana Rasputín, hermana de Coloso de la patrulla X, estaba perdiendo poco a poco su control sobre el Limbo (una dimensión demoníaca que ella reina).
La muchacha, tambien llamada Magik ó Niña oscura, es una mutante con el poder de controlar lo que ella llama "discos de paso".
Podía convocarlos y teletransportarse a ella y a otros a cualquier parte del tiempo y el espacio.

Últimamente, la influencia demoníaca de su reino estaba haciendo que perdiese su humanidad poco a poco, sobre todo tras la supuesta muerte de su hermano y la Patrulla X en la caída de los mutantes. Un demonio llamado S'ym, junto a otro llamado N'astirh, han convencido a los habitantes de ese reino infernal para que les apoyen a dar un golpe de estado en el Limbo y conquistar la Tierra.

Claremont y los Simonson decidieron que éste argumento de la serie de los chavales sería el escenario perfecto sobre el que basar el evento.

PATRULLA X.

Por otra parte en Uncanny X men, al final de la caída de los mutantes, los miembros (y miembras) de la Patrulla X "murieron" retransmitido en riguroso directo por televisión. Amigos y familiares lloraron el sacrificio del grupo al salvar la realidad del Adversario, una entidad adoradora del Caos.
Sin embargo, fueron resucitados por una diosa y les dió a elegir:
O continuar su vida en la Tierra o enviarles a otra dimensión para vivir felices. Los mutantes decidieron volver a la Tierra de nuevo y retomar sus vidas, pero los muy truhanes, y en un ejercicio de hijoputismo avanzado, decidieron dejar al mundo y a sus familiares creer que seguían muertos para así atacar a sus enemigos por sorpresa y sin poner en peligro a sus seres queridos.

Desde su nuevo hogar, un pueblucho abandonado en Australia, la Patrulla X siguió luchando por el sueño de Xavier desde el anonimato que les daba su nuevo status quo al margen de sus familias y amigos.
Tras varios meses, Madelyne Pryor, que acompañaba a la Patrulla X cuando "murieron", estaba cada vez más encabronada por haber sido abandonada y vilipendiada por su marido Cíclope.
Pasaba la mayor parte de su tiempo usando los ordenadores de la base australiana para hallar el paradero de su hijo. Un demonio llamado N'astirh contacta con ella y le promete encontrar a Nathan; además, también le ayudará a dar con los responsables de su desaparición: el grupo de asesinos llamados los Merodeadores y su líder, Mr. Siniestro.

X TERMINADORES.
La cuarta serie implicada en Inferno fue la llamada X teminators. Los protagonistas son el grupo de chavales reunidos por Factor X cuando usaban como tapadera lo de "cazadores de mutantes".
Después de cierto tiempo a su cargo, Factor X decidieron inscribirlos en una escuela normal y corriente para que se mezclaran con gente de su edad.
En el momento de comenzar la miniserie, los chavales son enviados para continuar sus estudios alejados de los problemas que podrían producirles estar viviendo en el ojo del huracán junto a Factor X. Los muchachos se ven envueltos en un complot demoníaco tras el rapto de dos de sus amigos, Artie y Sangui.









Argumento:
S'ym N'astirh, dos demonios del Limbo planean invadir la Tierra. Para ejecutar su plan consiguen engañan a Illyana para que abra un portal a la Tierra. Una vez abierto, la magia de N'astirh utiliza el poder de trece bebés mutantes que los demonios han raptado para utilizarlos como fuente de energía y así mantener ese portal abierto y que Illyana no pueda cerrarlo. Instantaneamente, cientos de demonios del Limbo cruzan el portal dimensional e invaden Manhattan.

Los Nuevos mutantes, ayudados por los X terminadores, usarán todas sus energías para proteger a los ciudadanos de la urbe, salvar a los trece bebés mutantes de las maquinaciones de N'astirh y cerrar el portal dimensional. Mientras, su compañera Illyana tendrá que luchar contra sus propios instintos demoníacos y salvar su alma o dejarse arrastrar por el infierno.

Mientras, los miembros de Factor X emprenden la búsqueda de el hijo de Cíclope enmedio de una Nueva York encantada e invadida por demonios. Su búsqueda les llevará hasta la Reina duende que reclama quedarse con su hijo. Pero la Reina duende no estará sola frente a Factor X...

Por otra parte, la Patrulla X ha localizado a sus enemigos los Merodeadores. El grupo ansía arreglar cuentas con ellos por el asesinato de los morlocks durante la masacre mutante.
Los hombres x viajan hasta los túneles que fueron testigos del exterminio, el lugar ideal para arreglar cuentas con los asesinos. La salvaje batalla acaba por conducirles hasta la superficie de Manhattan que ha sido transformada en un lugar demoníaco. Pero esa no será la única sorpresa del grupo ya que se encontrarán cara a cara con sus antiguos compañeros: Factor X.

Publicación:
Inferno se publicó originalmente en diversas series:
Uncanny X men vol 1º # 240, 241, 242, 243.
X Factor vol 1º # 36, 37, 38, 39.
New Mutants vol 1º # 71, 72, 73.
X Terminators # 1, 2, 3, 4.

Los equipos creativos tampoco están nada mal cobre todo en Uncanny y en Factor:
Chris Claremont guionizando y Marc Silvestri dibujando en Uncanny X men.
Louise Simonson al guión y su marido Walter Simonson a los lápices de X Factor.
Chris Claremont guionizando y Bret Blevins al dibujo en New Mutants.
y Louise Simonson de nuevo al guión y John Bogdanove a los lapices en X terminators.

Además, los editores de Marvel vieron un filón en la saga así que involucraron muchas más series en la movida.
Aunque estos "tie-ins" seguían sus propias líneas argumentales paralelas y no eran determinantes para hacer avanzar la trama principal, si que servían para mostrar la invasión demoníaca y sus efectos en la ciudad.
Como curiosidad había algún que otro cameo de algunos personajes en otras series (por ejemplo, los Nuevos mutantes aparecen luchando con demonios en uno de los números de los Vengadores o ayudando a Power Pack).
Estos son los tie-ins relacionados con Inferno:

Avengers: 298, 299, 300.
Power Pack: 4243, 44.
Daredevil: 262, 263265
Excalibur: 6, 7.
Web of Spiderman: 146, 147, 148
Spectacular Spiderman: 47, 48.
Amazing Spiderman: 311, 312, 313.
Fantastic Four: 322, 323.
Cloak and Dagger: 4,


Aquí en España había un problema grave llamado descoordinación. En Patrulla X había un desfase temporal entre los Usa y España de unos diez meses más o menos, con Factor X el retardo era similar, pero con los Nuevos mutantes habían como unos dos años por lo menos. Así pues, la publicación simultánea de estos tebeos en sus series era algo imposible.

Por eso cómics fórum decidió publicar Inferno como maxiserie aparte de 20 números.
Osea, que en casi dos años no terminaría de publicarse un crossover que en origen se leía en cuatro meses.

Además, mientras se publicaba Inferno en España, algunas series ya habían sobrepasado de largo los números relacionados con la saga, así que las consecuencias de Inferno las conocimos antes de la finalización de la maxiserie.
Por entonces nadie se quejaba como niñatos por los putos spoilers, y creo que la disfrutamos todos los que la leímos entonces por igual.

Opinión personal:
En mi modesta opinión éste es el crossover ochentero definitivo. Claremont y Simonson hicieron un gran trabajo arreglando como pudieron el desaguisado Jean Grey-Fénix-Madelyne Pryor.
No es que la explicación fuese la mejor posible, pero tampoco pudieron explicarlo mejor que de la estrambótica forma en que se hizo; visto con la perspectiva que da el tiempo, sacaron oro de el cenagal en que estaba la cosa.
Otro punto a favor es el morbo cuando Factor X y Patrulla X se encontraron enmedio del caos. Los de Factor X creían que la Patrulla X eran creaciones demoníacas, y los de la Patrulla estaban encabronados con Factor X al creer que "cazaban" mutantes. Ah, y como olvidarse del momento entre Lobezno y Jean Grey comiéndose el hocico delante de Cíclope.
Además, los efectos demoníacos en la ciudad de Nueva York: el Empire State con sus ascensores endemoniados, el metro viviente comiéndose a la gente, los buzones de correos asesinos y demás molaban por su humor negro.

En fín, por desgracia ya no hacen cosas tan vibrantes hoy en día...o lo mismo soy yo que soy un pureta algo cansado de ésta mierda.
Solamente hace falta una reedición de éste material en condiciones, ya que los tebeos estos se editaron hace ya veinticinco años más o menos (no sabéis lo que me duele desembolsarlos para releerlos).

Lo mejor: 
Convención anual de amantes del sado.
-La coordinación entre las series, salvo alguna pequeña incongruencia.
-La épica del encuentro entre Factor X y Patrulla X.
-Los Merodeadores dando por saco por allí.
-Las versiones de la Patrulla X influenciados por el ambiente demoníaco.
-La reina duende y su porno uniforme.
-Las portadas Españolas hechas por Juanjo Guarnido (el autor de Blacksad).
-Los episodios fill-in de Daredevil, con Matt en un estado mental muy jodido machacando sin piedad a demonios.


Lo peor:
-La edición Española de Inferno no está a la altura de las circunstancias (creo que se llegó a suprimir alguna que otra página de X terminadores para cuadrar formatos).
-Alguno de los números dibujados por Walter Simonson en Factor X. El tío me gusta mucho como guionista y dibujante, pero hay algunas cosas en los números 38 y 39 que parecen hechos con prisas y dan un poco de penica.



¡Saludos a tod@s!








sábado, 19 de julio de 2014

¿Qué hace éste cómic en mi estantería? Round 3. Daredevil:La pesadilla americana.





Ya he comentado varias veces que el Daredevil de la guionista Ann Nocenti es junto al de Frank Miller y el de Brian Michael Bendis mi favorito. ¿Razones? Hay múltiples y variadas, pero para razonarlo voy a recordar un número (el 27 de fórum) que cuando lo leí no me llamó mucho la atención.
Hace poquito, en una de mis noches de jardín, cubata y tebeos, revisé éste número.

La historia tiene lugar en la etapa en que Daredevil dejaba la cocina del infierno después de su historia chunga con María Tifoidea y de ponerle los cuernos a Karen Page. Matt se colgó la mochila y se recorrió el país a "buscarse a sí mismo".
El abogado ciego llegaba a un pueblo dónde vive un inmigrante llamado Víctor. El hombre éste llegó a estados unidos en busca del sueño americano y trata de materializarlo creando un coche con productos reciclados.
Pues bien, a partir de promocionar su invento al hombre se le viene todo encima. Hacienda comienza a investigarle, recibe la visita de inmigración que intenta buscar cualquier excusa para tirarlo del país y demás marranadas. Daredevil y el Capitán América se ponen de parte del hombre y hasta intentan frustrar sin éxito el que unos matones destrozen el coche que ha fabricado.

Tras esos hechos el pobre tipo se desmorona e intenta saltar de un edificio ante los impotentes héroes y vecinos que observan desde el suelo a Víctor envuelto en una bandera americana y con el ánimo destrozado. Cuando salta al vacío, Víctor se desprende de la bandera y muestra su último invento: un jetpack que evita que se estampe contra el suelo en el último momento.
El Capitán América recoge y abraza la bandera caída contento por ver que a pesar de todo, Víctor no ha dejado de soñar el sueño americano.

A grandes rasgos, Nocenti describe un gobierno corporativo que intenta evitar un cambio del modelo en el estilo de vida americano en ésta corta historia.

Me resulta muy curioso que éste cómic no lo recordara tan crítico, y es que Ann Nocenti utiliza al Capitán América convirtiéndolo en un perroflauta de cuidado.

En fín. Hasta otra, me voy a dormir un rato. ¡Saludos!






viernes, 18 de julio de 2014

New power Soul.

Como estoy en horas bajas en cuanto a posteos que publicar, voy a usar el comodín del "disco de Prince" para rellenar posteos en éste mes de Julio.

Anteriormente, en uno dedicado a Emancipation, habíamos visto el nuevo campo de pruebas de Prince basado fundamentalmente en la experimentación tanto a nivel compositivo como en diversas formas de marketing y distribución.

Toda esta etapa "experimental", que para mí abarca parte de su trabajo en 1995: el álbum Exodus de New Power Generation y el de su mujer, Mayte: Child of the sun, continúa con Emancipation (1996), el triple cd de descartes Crystal Ball (1997) y sus "agregados": The Truth (1997) y Kamasutra (1997); este New power soul (1998) y terminando con Rave un2 the joy fantastic y su remezcla Rave in2 the joy fantastic de 1999.
Como decía, ésta etapa supone su descenso hacia los bajos fondos de la industria musical, lugar donde merodeó como un paria de la música durante la parte final de los años 90 hasta su renacimiento como Prince en 2001 con el apoteósico The Rainbow children.

Con diversos bandazos (buenos, malos y reguleros), esta etapa le sirvió para hacer evolucionar a su música sin injerencias de otros elementos externos como listas de ventas y críticas musicales. Por cierto, las críticas negativas hacia su música eran demoledoras y constataba que su guerra contra la industria musical le estaba saliendo muy cara.

Este New Power Soul no está firmado por él, sino por su banda New Power Generation. El que aparezca en portada con esa pintica de mamarracho gay (ojo, que lo digo con cariño) creo que era un reclamo para los despistados. Además, gracias a su emancipacipación de Warner Bros, ya podía dar la cara sin problemas legales de por medio. Por ejemplo, en el anterior disco de la banda, Exodus, él aparecía disfrazado bajo una nueva identidad llamada Tora Tora (iba con la cara cubierta con un pañuelo y en las entrevistas hablaba por señas o por boca de Mayte).

Las composiciones del disco y la voz principal son obra suya, dando mayor cancha en estudio a la nueva alineación de la New power generationKirk Johnson a la batería; Rhonda Smith al bajo; Mike Scott, a la guitarra; Mr Hayes a los teclados; Marva King en los coros, el odioso de Doug E. Fresh rapeando y haciendo el mongolo y aportaciones de Larry Graham y Chaka Khan, cuyos discos producidos por Prince formaban una especie de trilogía junto a éste (igual que en los discos de ellos él aparece cantando o tocando la guitarra en algunos cortes).

En éste disco, que sirve como vehículo de lucimiento para su lado más funk electrónico y negro, olvidamos al Prince de las canciones rockeras épicas y el popeo más armónico y nos vamos de juerga con sintetizadores, cajas de ritmos, bajos, vientos, funk al más puro estilo George Clinton y un sabor a música "coital" muy acentuada.

New Power Soul.
La primera parada es el tema que da nombre al disco. Con un guiño a la canción Big fun  "Get freaky, let your head bob", que recita como un mantra durante la canción y algún que otro sample de Come, nos sumergimos en un corte plagado de scratches, hornzs, funk futurista y algún momento de rap (en el que recita insertando en los versos los títulos de las canciones del disco). El tema no te deja con el culo torcido, pero si tiene un ritmo endiablado que no nos deja un momento de respiro.


Mad Sex.
"Solía tener tener sexo loco por la mañana cachonda,
Solía tener tener sexo loco al atardecer,
Solía tener tener sexo loco cuando yo y esa mulata bajábamos,
a ensuciar otra habitación."

Con ese estribillo tan explícito damos la bienvenida a un temilla, con sabor a sudor sexual y marranadas.
Prince utiliza jergas y modismos callejeros y usa su voz para sonar a macarrilla del callejón de atrás mientras el ritmo no decae en ningún momento marcando la cadencia del tema entre el bajo y los vientos. Buen tema para darse un bailoteo.

Until u're in my arms again.
Siguiendo la estela de enchochamiento iniciada en Emancipation tenemos aquí su continuación.
No es mal tema, pero cuando pensabas que el disco iba a seguir por el funk bailable, al tío le da por meter esta canción llena de bucles electrónicos y de ritmo mucho más tranquilo. Suena más al difunto que a Prince, pero la producción es muy buena y sigue con la misma línea a nivel de arreglos que las anteriores, así que no desentona en su conjunto. No demasiado reseñable como canción, aunque la parte final con esa maestría mezclando voces y un par de falsettos finales molan.

When U love somebody.
Empecé odiando esta canción, pero con el tiempo he apreciado las tantas capas sonoras y el puto ritmo que tiene la jodida. Tiene unos toques muy horteras en el puente y en el momento de rotura (2:51), pero compensa la balanza los montones de aciertos que hay en la canción.
La esencia del tema es sobre alguna tipa con mucho morro que le lleva por el camino de la amargura, pero a el le da igual por que está encoñao como un idiota (¿Problemas con la parientaPrince?).
Aunque en el estribillo se pasa de pastoseo:
"When u love somebody, every now and then is like rain. With every sun shower this pain, whatever something lost, something gain when u love somebody".

Los toques horteras que hay en la canción y lo chorra del estribillo le vienen como anillo al dedo el título de "cuando amas a alguien".
No digo que sea una obra maestra ni nada de eso, pero me mola éste tema...y no me avergüenza admitirlo, copón!

Shoo-bed-ooh.
Otra que a las primeras escuchas no me dice nada, pero algunas cosas de la letra (el estribillo sobre todo) me llama mucho la atención:
"La respuesta a la pregunta de la vida es una zorra canosa, chupando a un bailarín de ébano entre estas sucias sábanas. Escupiendo el regusto de un niño que probablemente no vuelva a llamar. 
¿Si éste es el juego por el que estás haciendo cola, como vas a ganar?".
Entre la letra subida de tono y la música marciana le he terminado por coger el rollo. Aunque reconozco que muchas escuchas me ha ayudado a apreciarla.

Push it up!
Rescatamos el "Everybody is here, this is the jam of the year" como guiño a Emancipation. Esta canción es un híbrido entre funk y rap bastante simpatiqueta. lo malo es que por ahí resopla el pena ese de Doug E. Fresh zorreando. Gana muchos enteros en directo por su aire festivo. ¡No está mal el Push it up éste!

Freaks on this side.
Bueeeno, siempre hay algo de relleno que no me termina de molar y ésta cosa tiene todas las papeletas. Como la anterior, está más orientada para lucirla en directo y chorrear con el público.Tiene unos vientos potentes durante todo el minutaje, pero para mí es la Esperanza Aguirre del disco.Mal Prince, muy mal. Así no vamos a ningún lado.
 :(

Come on.
Una de las canciones fetiche de la época para Prince. Una lírica sexualmente cargada acompañada de un ritmo constante no demasiado acelerado, justo para acompañar a los previos al coito. Acertadamente ésta canción fue una de las que más utilizaba en conciertos y presentaciones en vivo. Le he terminado por coger un poco de tirria, pero reconozco que es otro de los clásicos modernos de el artista antes conocido como Prince.
Acompaña a las voces su amiga Chaka Khan, Mike Scott a la guitarra y creo que Larry Graham aporta el bajo.

The One.
Solamente por la inclusión de esta joyaza ya vale la pena el disco entero. Un tempo muy reposado, el misterioso bajo de Rhonda Smith, los ecos arábigos, el solo de flauta, los arreglos orquestales de Clare Fischer y la letra tan empalagósamente boquerona como efectiva nos sitúa en el mejor momento del disco.
Impresionante.

I like funky music.
Como reza el título "Me gusta la música funky". Una cancioncica bastante rápida de ritmo, buen rollera y con unos coros por ahí muy graciosos como de el público repitiendo "I like funky music". No es una de mis favoritas, pero si que levantan el ánimo y tiene su aquel.

Wasted kisses.
Y como tema oculto (pista 49) encontramos esta otra joyaza impresionante, a la altura de The One (de hecho, son las dos joyas absolutas de New Power Soul). Hay que escucharla para apreciar todos los detalles de producción y efectos sonoros que hay, sobre todo ese sobrecoger sonido de monitor de hospital en línea plana del final que es la interpretación de la muerte de alguien.
Me encanta esta canción tan oscura y emotiva de la que se rumorea que está inspirada en la muerte de su hijo, o a lo jodida que debía estar la cosa con Mayte. La ambigüedad de la letra es lo que tiene, cada cual interpreta las cosas a como las ve.


En resumen, New power soul no suele ser un disco demasiado bien valorado por los fanboys. Mola por tener temas tan contundentes como Come on, The One y Wasted kisses, por tener los huevos tan gordos como para salir en portada con esas pintas y con su puto micrófono/pistola (decía que significaba que su única arma eran sus palabras), por la experimentación y por ir a su bola importándole una mierda todo lo demás. 
Además, el nivel de producción y muchas ideas desplegadas le sirvieron como base para evolucionar en años venideros. Si hay una cosa que resalto del disco es que suena muy por delante a otras cosas de 1998. Pero bueno, eso casi siempre pasa con su música.

Saludos y hasta otra.

jueves, 17 de julio de 2014

Génesis mortal.

Retrocontinuidad. Palabreja de oscuras implicaciones y de efectos catastróficos si se lleva a cabo malamente. Éste recurso narrativo consiste en reinterpretar un suceso del pasado cambiando algún elemento de la narración original de tal manera que ese suceso adquiera un significado distinto al que previamente se pretendiera y que suele afectar en mayor o menor medida al presente o al futuro de alguna historia.

Casos como lo visto en la saga de Onslaught con la grabación que vió Bishop antes de viajar en el tiempo en Uncanny X men 287, y que con unos hábiles cambios de diálogos en el especial X men: Onslaught aclaraba el tema del traidor en la Patrulla X; y otros más chungos como en Uncanny X men vol 1º 350 con el "juicio de Gambito" y su culpa al guiar a los Merodeadores a los túneles morlocks en la Masacre mutante, cuando en realidad quedaba muy claro en Uncanny X men vol 1º 211 que los Merodeadores obligaron a un morlock a que les condujera a los túneles (puto vago de Lobdell que fue incapaz de documentarse bien antes de meter la pata así, copón).

El tema que nos ocupa hoy también es bastante sangrante (en mi opinión), ya que afecta mucho a la imagen que tenemos de Charles Xavier y ésta aventura sirvió para aumentar más aún el ego de Ed Brubaker.


Sinopsis:
Después de la famosa frase de la Bruja escarlata "no más mutantes" al final de Dinastía de M, la raza mutante se ha visto reducida a 198 individuos. Ahora, al borde de la extinción de su raza, la Patrulla X se enfrenta a la genial idea del gobierno Usa de empacarles en los terrenos de la mansión a una nueva generación de centinelas con el pretexto de brindarles seguridad como si el instituto Xavier fuese una reserva.

Mientras, en lo profundo del espacio un poderoso mutante ha despertado gracias a los efectos del encantamiento de la Bruja escarlata. El tipo regresa a la Tierra buscando vengarse del profesor Charles Xavier y por extensión de la Patrulla X.
Los hombres x deben detener a ese misterioso enemigo y desentrañar las razones de su odio hacia Xavier.

Mientras tanto, en la isla Muir, Sean Cassidy, alias Banshee, encuentra una información que ha permanecido oculta hasta ahora y que podría cambiar para siempre la percepción que los hombres x tienen sobre el profesor Charles Xavier (desaparecido desde la saga Dinastía de M).

Opinión con destripes a mansalva:
Reconozco que a lo peor soy un poco talibán, pero lo que hace Brubaker es mearse de mala manera en el profesor Xavier y en Moira Mactaggart.

Todos recordamos el Giant Size X men nº1, ¿verdad? Por si acaso, en él el profesor Xavier reunía a un nuevo equipo de mutantes para rescatar a la Patrulla X original (quienes habían sido apresados por la isla-mutante Krakoa).
Los nuevos hombres x tuvieron éxito y a partir de entonces ellos ocuparon el lugar de los antiguos miembros. Así, Tormenta, Coloso, Lobezno, Rondador nocturno, Banshee, Ave de trueno y Cíclope se convirtieron en la nueva Patrulla X llevando a la serie a sus mejores días de gloria.

Pues nada, Ed Brubaker, que se cree un poco el "papichulo" de los guionistas de tebeos, se saca de la manga que el profesor Xavier reclutó a otros cuatro mutantes antes que a Tormenta, Lobezno, Coloso y compañía. Su ex amante Moira Macttagart tenía un grupo de jóvenes mutantes a su cargo (Petra, Dominio, Darwin y Kid Vulcano) y Xavier convenció a Moira para enviarlos a Krakoa y rescatar a la Patrulla X.

La misión salió como el culo y esos cuatro mutantes murieron a manos de Krakoa. Pues al cenutrio de Xavier no se le ocurre otra cosa que borrar los recuerdos sobre lo acontecido a Cíclope (el único que había interactuado con ellos), hacer como si no hubiera pasado nada y reclutar a otra Patrulla X (con los resultados que todos conocemos y que se cuenta en Giant Size X men nº 1). Moira no se lo tomó muy bien, pero aún así se calló la boca (hasta que a su fantasma le dió por indicarle a Banshee donde guardaba una grabación contando lo sucedido).

Con todos estos datos sobre la mesa podemos afirmar que el santísimo Charles Xavier, durante años la encarnación mutante de Martin Luther King, el íntegro profesor, es en realidad un rufián manipulador y un mentiroso de la hostia.
Además como bonus track, el tal Kid Vulcano resulta ser el hermano insinuado hace mucho tiempo por Mr. Siniestro de Cíclope y Kaos, información que Xavier se calla como un cabrón. Por supuesto, cuando se descubre todo el marrón Xavier se disculpa y lloriquea un poco arrepentido como si de un monarca español al que pillan de safaris y de putas se tratara.

Por otro lado también nos despedimos de un personaje clásico de la serie de una manera bastante gratuita. Y, por desgracia, sin visos de resucitarle.

Como cosas positivas podemos resaltar a Darwin y Vulcano. Dos personajes con bastante potencial al que no se les ha sacado demasiado brillo (sobre todo a Darwin). El primero usado en la etapa de Brubaker en Uncanny X men en"Auge y caída del Imperio Shi'ar", saga de doce números heredera directa de los sucesos que se inician en ésta miniserie, y luego por Peter David para su Factor X. Y el segundo, sirvió como villano desquiciado e inmisericorde durante esa misma saga y sus continuaciones: Emperador Vulcano y War of kings.

Cada uno de los seis capítulos tiene una historia de complemento para profundizar en los orígenes de Petra, Dominio, Kid Vulcano y Darwin. Por cierto,en la edición española de la miniserie nos colaron un séptimo capítulo con un what if? (una especie de ¿Qué hubiera pasado si...?) bastante olvidable que sirve solo para sacarnos del bolsillo 2.90 euros más. Muy listos estos de Panini, si señor.

La parte gráfica está a cargo de un competente Trevor Hairsine, un dibujante británico con cierto parecido a Bryan Hitch y las portadas fueron ilustradas por el gran Marc Silvestri.

En resumen, esta miniserie solo es recomendable paraconocer los orígenes de Vulcano (vitales para un par de sagas posteriores), enterarse de otra barrabasada más de Xavier y por las reacciones de Cíclope y el resto de la Patrulla X. 

En mi opinión falla miserablemente por que algo tan gordo como ocultar la muerte de unos chavales a la Patrulla X y no mostrar ningún sentimiento acerca de ellos durante lustros no cuadra de ninguna manera con la personalidad de Charles.

Pero bueno, no exijamos demasiado que solo son tebeos.

Hala. Saludos a tod@s!